Un estudio revela que cada vez más gerentes confían en la IA para tomar decisiones de personal

He aquí un pensamiento aterrador: tu seguridad laboral podría estar en manos de la IA.

Eso según un nuevo estudio del sitio de carreras Resumebuilder.com , que encontró que cada vez más gerentes confían en herramientas como ChatGPT para tomar decisiones de contratación y despido.

Los gerentes de todo Estados Unidos están subcontratando cada vez más cuestiones relacionadas con el personal a una variedad de herramientas de inteligencia artificial, a pesar de no estar muy familiarizados con el uso de la tecnología, según una encuesta a más de 1.300 personas en puestos de nivel gerencial en diferentes organizaciones.

La encuesta reveló que, si bien un tercio de las personas a cargo de las trayectorias profesionales de los empleados no cuenta con capacitación formal en el uso de herramientas de IA, el 65 % la utiliza para tomar decisiones laborales. Según la encuesta, incluso más gerentes parecen recurrir considerablemente a la IA al decidir a quién contratar , despedir o ascender. El 94 % de los gerentes afirmó recurrir a herramientas de IA cuando se les asigna la tarea de determinar quién debe ascender, obtener un aumento salarial o incluso ser despedido.

La creciente dependencia de los gerentes de las herramientas de IA para la toma de decisiones relacionadas con el personal contradice la idea de que estas tareas suelen ser competencia de los departamentos de recursos humanos. Sin embargo, las empresas están integrando rápidamente la IA en sus operaciones diarias e instando a sus empleados a utilizarla.

"La orientación que los gerentes reciben una y otra vez de sus directores ejecutivos es que esta tecnología está en camino y que es mejor empezar a usarla", declaró Erica Pandey, reportera de Axios Business, a CBS News. "Y muchas de las decisiones que toman los gerentes son cruciales: contratar, despedir, aumentar y ascender. Por lo tanto, tiene sentido que estén empezando a utilizarla".

Sin duda, existen riesgos asociados con el uso de IA generativa para determinar quién asciende en la escala corporativa y quién pierde su trabajo, especialmente si quienes usan la tecnología no la entienden bien.

"La IA es tan buena como los datos que se le suministran", dijo Pandey. "Mucha gente desconoce cuántos datos se le deben proporcionar. Y más allá de eso... esta es una decisión muy delicada; involucra la vida y el sustento de alguien. Estas decisiones aún requieren la intervención humana; al menos, una persona que revise el trabajo".

En otras palabras, pueden surgir problemas cuando la IA determina cada vez más las decisiones de personal con poca participación de los gerentes humanos.

"El hecho de que la IA pueda, en algunos casos, tomar estas decisiones de principio a fin... Piensen en un gerente que simplemente le pregunta a ChatGPT: '¿A quién debería despedir? ¿A cuántas personas debería despedir?'. Eso me parece realmente alarmante", dijo Pandey.

Las empresas también podrían verse expuestas a demandas por discriminación.

Informe tras informe nos ha demostrado que la IA es sesgada. Es tan sesgada como la persona que la usa. Por lo tanto, se podrían encontrar muchos problemas legales para las empresas, dijo Pandey.

La IA también podría tener dificultades para tomar decisiones acertadas sobre el personal cuando el éxito de un trabajador se mide cualitativamente, en lugar de cuantitativamente.

"Si no hay cifras concretas, es muy subjetivo", dijo Pandey. "Requiere deliberación humana. Probablemente, también de mucha más gente".