Más allá de Machu Picchu: Cómo un operador boutique apuesta por la opulencia geográfica en Perú

Andean está innovando en Sudamérica, rompiendo con los circuitos de lujo tradicionales y los destinos de lista de deseos, al mismo tiempo que se siente artesanal y conmovedor.
Mientras muchos viajeros aún persiguen el icónico circuito peruano de Machu Picchu, una nueva generación de operadores está apostando a lo que el visionario de la hospitalidad James McBride llamó "opulencia geográfica": dejar que los dramáticos e intactos paisajes del Perú hagan el trabajo pesado.
Uno de estos operadores, Andean, inauguró recientemente su propiedad más aislada, Tinajani, una "aldea de tiendas de campaña en el valle de los gigantes" donde los huéspedes duermen en alojamientos de lona con vistas a un paisaje agreste y hermoso a 4000 metros sobre el nivel del mar en el remoto Cañón de Tinajani, Perú. La propiedad abarca 121 hectáreas vírgenes de una antigua granja de ovejas, con seis campamentos diseñados para lo que la compañía llama "aventureros en busca del silencio".
"No construimos nada desde cero", explica Ignacio Masias, fundador de Andean. "Voy a un lugar y percibo una atmósfera especial, algo especial, una sensación especial en el lugar. Luego, creamos un personaje y una historia detrás de este lugar, y luego lo reconstruimos para hacerlo realidad".
Esta filosofía representa un cambio en la forma en que las marcas de lujo se acercan a Perú, y ha comenzado a dar dividendos entre los viajeros sofisticados que tienen una mentalidad expedicionaria.
skift.