Los centros de ayuda en Gaza fueron cerrados el día anterior tras informes de incidentes fatales.

Los controvertidos centros de ayuda en la asediada Franja de Gaza reabrirán hoy a la población necesitada tras una jornada de "obras de renovación". La Fundación Humanitaria de Gaza (FGH) no anunció en su página de Facebook en árabe la hora de reapertura de las instalaciones, que permanecieron cerradas el miércoles. Tras los repetidos informes de tiroteos mortales contra palestinos en los centros, se prevé mejorar la seguridad.

Mientras tanto, el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, justificó el veto estadounidense en el Consejo de Seguridad de la ONU, que Washington utilizó para bloquear una resolución que habría exigido un alto el fuego inmediato en Gaza y el acceso sin trabas a la ayuda humanitaria. «No apoyaremos ninguna medida que no condene a Hamás» y exija que la organización terrorista islamista se desarme y abandone la Franja de Gaza, declaró, según un comunicado.

Se afirmó que la aprobación de la resolución habría fortalecido la capacidad de Hamás para socavar los esfuerzos diplomáticos en curso para lograr un alto el fuego. Los demás 14 Estados miembros del Consejo de Seguridad votaron a favor de la resolución.

Esto se produce en medio de la creciente preocupación por la distribución de ayuda en la zona costera aislada, donde, según la ONU, más de dos millones de residentes corren el riesgo de morir de hambre tras la prohibición total de Israel de entregar alimentos y otros tipos de ayuda durante 11 semanas. Según el gobierno israelí, la prohibición buscaba aumentar la presión sobre Hamás para que liberara a los últimos rehenes secuestrados en el ataque terrorista ocurrido en Israel el 7 de octubre de 2023.

Hace apenas dos semanas, Israel flexibilizó el bloqueo a la entrega de ayuda humanitaria. Recientemente, la GHF asumió la distribución de esta. Esta organización, apoyada por Israel y Estados Unidos, está eludiendo a las agencias de ayuda humanitaria de las Naciones Unidas y otras iniciativas, poniendo en peligro a la población civil, según evaluaciones de la ONU, y violando las normas establecidas de ayuda neutral.

Tras los informes de tiroteos mortales contra palestinos en puestos de ayuda en los últimos días, la GHF quería mejorar la seguridad en la zona. En una publicación de Facebook, se indicó que se está trabajando para que la distribución de paquetes de alimentos sea lo más segura posible. Se insta a todos los palestinos que viajen a los centros de distribución a seguir las rutas establecidas por el ejército israelí por razones de seguridad.

Sin embargo, el controvertido anuncio de la fundación no especifica si todos los centros de distribución que opera reabrirán ni cuándo exactamente. Se proporcionará información sobre el horario de apertura tan pronto como finalicen las obras de mantenimiento y reparación, según indicó. Esto podría dificultar que los residentes de Gaza planifiquen las largas y peligrosas caminatas para recoger la ayuda, informó el Times of Israel.

El domingo, lunes y martes, el ejército israelí disparó contra palestinos que se acercaron a las tropas, según informó el periódico. Se desviaron de una ruta previamente autorizada. Según la Autoridad Sanitaria, controlada por Hamás, el martes, soldados israelíes mataron al menos a 27 palestinos e hirieron a unos 90 cerca de un centro de distribución cerca de Rafah.

En cambio, el ejército israelí afirmó que los soldados habían visto a sospechosos que representaban una amenaza a aproximadamente medio kilómetro del punto de distribución. Dado que no se retiraron a pesar de los disparos de advertencia, los soldados israelíes dispararon contra sospechosos individuales. Ninguna de las declaraciones de ninguna de las partes puede verificarse de forma independiente.

El gobierno israelí justifica la controvertida redirección de la ayuda humanitaria alegando que Hamás había robado previamente los suministros. Sin embargo, según las agencias de la ONU, Israel no ha aportado ninguna prueba del robo sistemático de ayuda humanitaria por parte de Hamás.

El ministro de Asuntos Exteriores alemán, Johann Wadephul, recibe hoy en Berlín a su homólogo israelí, Gideon Saar, tras su promesa de mayor ayuda armamentística a Israel en el Bundestag el miércoles. Esta mañana, el político de la CDU y su invitado israelí visitarán el Memorial del Holocausto y depositarán una corona de flores en el Monumento a los Judíos Asesinados de Europa. Es probable que sus conversaciones posteriores también aborden la masiva acción militar de Israel y la catastrófica situación humanitaria en la Franja de Gaza.

La guerra se desencadenó tras el ataque de Hamás y otros terroristas islamistas contra Israel el 7 de octubre de 2023, en el que murieron alrededor de 1200 personas y más de 250 fueron tomadas como rehenes. Desde entonces, según la Autoridad Sanitaria, controlada por Hamás, más de 54 600 palestinos han muerto en la Franja de Gaza. Esta cifra no distingue entre combatientes y civiles y es difícil de verificar de forma independiente.