¿Cuál es el panorama con el que el Congreso recibe una posible reforma tributaria del gobierno Petro?

De nuevo, el país comenzó a hablar sobre la inminente llegada de una reforma tributaria para su debate al Congreso. Su aterrizaje sería apenas comience la última legislatura. La discusión comenzó a moverse con fuerza ante la situación fiscal del país y ante la noticia de que Standard and Poors bajó la clasificación crediticia de Colombia. El presidente Gustavo Petro agudizó el debate luego de que se conociera que el Banco de la República se mantuvo en la tendencia de no bajar la tasa de interés.

“Cada vez que la junta directiva del Banco de la República no baja la tasa real de interés, subirá el déficit, ante la ausencia de una reforma tributaria progresiva”, dijo el primer mandatario en un trino este viernes. Y es que desde hace unos días el Ministerio de Hacienda ya dio unas pinceladas de hacia dónde iría esa reforma.

De acuerdo a una intervención del ministro de Hacienda, Germán Ávila, se ha planteado que dicha propuesta “haga modificaciones al los impuestos del Carbono, IVA para juegos de azar, plataformas e iglesias, junto con impuesto especial de carbón y petróleo. Otros impuestos dirigidos a gravar la contaminación”. En las cuentas del gobierno está que dicha tributaria permita al menos recaudar los 12 billones del déficit inicial con el que venía el presupuesto y hasta 7 billones más.

Sin embargo, al hablar con distintos sectores, en el Congreso son escépticos en la propuesta que se va a lograr. El representante Álvaro Monedero, de las comisiones económicas, le dijo a EL TIEMPO que no ve de dónde salen las cuentas planteadas por el gobierno. En ese sentido, señaló que desde el Ejecutivo se ha planteado incluso tumbar algunas de las exenciones del IVA, que puede ir en contravía con el bolsillo de los colombianos y temas tan básicos como la canasta familiar.

En esa línea, este uno de los que dice que toca esperar a ver cuál es la propuesta del gobierno, pues si implica nuevos impuestos, es muy poco probable que la Comisiones Económicas y que las respectivas plenarias voten a favor una propuesta de esa índole. No hay que olvidar que la última legislatura transcuerre en medio del debate electoral y nadie va a querer acompañar una propuesta que se meta como el bolsillo de los colombianos. Algunos lo ven como un tiro en el pie para las aspiraciones de regresar al Congreso en el próximo cuatrienio.

“No veo un ambiente muy favorable”, dijo otra representante de las económicas cercanas al gobierno y que pidió reserva de su nombre. Todos ellos apuntan a que una propuesta de esta índole no cae bien en año electoral. Apoyarla puede costar votos. No obstante, también está la situación fiscal del país.

En diálogo con EL TIEMPO, esta representante dijo que había que esperar a ver cuál es la propuesta que llegará desde el gobierno, pero que no se puede descartar de tajo debido a que es “calamitosa la situación fiscal del país”. Suma también la decisión de usar la cláusula de escape de la regla fiscal y propuestas de recorte fiscal que no se ven realizables en el corto plazo, pues no ve la voluntad del gobierno Petro para hacerlo.

Otros sectores de las comisiones económicas, sin conocer la propuesta, señalan que ven como probable que la propuesta pase, pues el gobierno demostró que puede lograr mayorías en temas controversiales como la reforma laboral. “Son mayoría frágil, pero el gobierno demostró que puede moverse con fuerza”, expresó un senador de las Económicas consultado por este diario.

Sin embargo, no es tan claro que la reforma laboral sea un antecedente confiable. En ese caso, había varias propuestas que eran del interés de la ciudadanía. En cambio, en esta ocasión, la reforma tributaria puede verse como un ataque al bolsillo de la ciudadanía y así se vea como necesaria, no es una movida popular en momentos electorales.

Más que la laboral, un posible espejo de una reforma tributaria es lo que ocurrió con la ley de financiamiento en diciembre. Ante la posibilidad de nuevos impuestos, las Comisiones Económicas la rechazaron. Incluso, en este caso, las cuatro células legislativas votaron de forma afirmativa el archivo. Esta es la muestra más inmediata de lo que podría ocurrir de nuevo con el nuevo intento del gobierno de buscar recursos a través de cambios en la carga impositiva.