Un funcionario electo llama a los suizos a boicotear los productos estadounidenses


Los aranceles del 39% impuestos a Suiza por Estados Unidos han indignado al consejero nacional Reto Nause (C/BE), quien pide alternativas a los productos estadounidenses. "Reconsideraré radicalmente mis decisiones de compra. Quizás la masa de consumidores suizos pueda provocar una reacción", declaró el jueves en un mensaje en la red social X... completamente estadounidense. Explicó en "Schweiz am Wochenende" este sábado que, por ejemplo, "soy adicto al iPhone, pero la próxima vez que compre un teléfono, buscaré otra marca".
No inventó nada nuevo. Tras los primeros anuncios arancelarios, se lanzaron llamamientos al boicot en diversas partes del mundo. Desde las decisiones finales, algunos han sido especialmente fuertes en India, un país afectado por aranceles del 50%. El país donde el boicot ha sido ampliamente seguido es Canadá, nuevamente en el contexto de la guerra comercial. Pero en línea, más ciudadanos de todo el mundo piden un boicot a Estados Unidos por el apoyo estadounidense a Israel que por las decisiones aduaneras.
Como recordó el periódico alemán el sábado, "Galaxus" había consultado a sus clientes sobre la posibilidad de un boicot. "En mayo, más del 60% quería apostar por productos europeos en respuesta a los punitivos aranceles estadounidenses", señaló la compañía en aquel momento. Un mes después, analizó sus ventas. La proporción de productos vendidos de marcas estadounidenses había caído del 18,3% al... 17,5%. "Solo palabras, solo palabras", bromeó "Galaxus".
Suiza es un país pequeño, e incluso si un boicot se implementara ampliamente, probablemente no inquietaría a Donald Trump. Sobre todo porque, como señaló "Galaxus", ¿qué es estadounidense? En su análisis, la empresa tuvo en cuenta las sedes de las marcas. Renunciar a los productos de Apple o Nike está bien, pero, por supuesto, no se fabrican en Estados Unidos. Boicotear un país en una economía globalizada no es tarea fácil.
20 Minutes