Nadar en el Sena: 35.000 nadadores en un mes pese a 13 días de cierre

Cuando el agua impide nadar. Los tres espacios abiertos a principios de julio en el Sena (Bercy, Bras-Marie y Grenelle) sufrieron las lluvias de verano, aunque han acogido a más de 35.000 personas desde su apertura, según informó el Ayuntamiento de París el martes 5 de agosto.
" Sabíamos que el clima sería un factor ", comentó Pierre Rabadan, teniente de alcalde de París para el deporte, y " llovió bastante " en julio, con precipitaciones superiores a los 20 mm. La piscina estuvo abierta 18 días y cerrada 13, siendo la piscina de Bercy " la más afectada ". " Pero estamos muy satisfechos ", añadió.
En 2016, la alcaldesa socialista de París, Anne Hidalgo, prometió limpiar el río para que los parisinos pudieran bañarse. Casi diez años después, el 5 de julio se inauguraron tres espacios tras las competiciones olímpicas celebradas en el Sena en el verano de 2024. Para lograrlo, el depósito de aguas residuales y pluviales ubicado en Austerlitz está operativo desde el verano pasado. En total, la limpieza del agua habrá requerido una inversión de más de 1.400 millones de euros. « No hubo vertidos (de alcantarillado al Sena, nota del editor) durante el verano », asegura Pierre Rabadan.
" Hay clientes habituales que esperan la apertura, quienes salen a correr y luego nadan, familias, pero también turistas ", señala el funcionario electo sobre el perfil de los bañistas. Las boyas de natación obligatorias permiten que estos últimos " permanezcan más tiempo " en el agua y " charlen con sus amigos ". Estos espacios cerrarán a finales de agosto " por ahora ".
En caso de cola, " habrá un sistema de pulseras ", añadió. Hasta la fecha, la mayor asistencia diaria fue de 5.700 personas el 13 de julio.
Libération