Protestas en Ucrania tras la firma de un proyecto de ley contra los organismos anticorrupción por parte de Zelenski

El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, firmó un proyecto de ley que, según sus críticos, debilita la independencia de los organismos anticorrupción del país, lo que provocó protestas y atrajo críticas internacionales.
Los críticos dicen que la nueva ley socava la autoridad de la Oficina Nacional Anticorrupción (Nabu) y la Fiscalía Especializada Anticorrupción (Sapo), colocándolas bajo el control del fiscal general.
En un discurso pronunciado el miércoles, Zelensky dijo que ambas agencias seguirían "trabajando", pero que era necesario liberarlas de la "influencia rusa".
Tras la aprobación del proyecto de ley, cientos de personas se reunieron en Kiev para la mayor protesta antigubernamental desde el inicio de la invasión a gran escala de Rusia en febrero de 2022.
También se vieron manifestaciones en las ciudades de Lviv, Dnipro y Odesa.
"Elegimos Europa, no la autocracia", decía un cartel que sostenía un manifestante. "Mi padre no murió por esto", decía otro.
El fiscal jefe de Ucrania, Ruslan Kravchenko, leal a Zelensky, ahora podrá reasignar las investigaciones de corrupción a investigadores potencialmente más complacientes, e incluso cerrarlas.
En su discurso, Zelensky criticó la eficiencia de la infraestructura anticorrupción de Ucrania y afirmó que los casos habían estado "inactivos".
"No hay ninguna explicación racional de por qué procesos penales que valen miles de millones de dólares llevan años 'pendientes'", afirmó.
Agregó que el Fiscal General garantizará "la inevitabilidad del castigo" para aquellos que infrinjan la ley.

Para los críticos de la legislación, esto contradice más de una década de esfuerzos a favor de la democracia y contra la corrupción.
Fueron estas aspiraciones las que llevaron al levantamiento de Euromaidán y a la caída del presidente prorruso Viktor Yanukovych en 2014, seguidas por la invasión rusa y la muerte de cientos de miles de personas.
El gobierno ucraniano ha citado la influencia rusa para limitar los poderes de Nabu.
El día antes de que se aprobara la controvertida ley, el Servicio de Seguridad de Ucrania y la oficina del fiscal general llevaron a cabo búsquedas y arrestos de presuntos espías rusos en Nabu.
La medida ha provocado preocupación entre los aliados occidentales de Ucrania.
El sistema anticorrupción independiente de Ucrania se creó por insistencia y bajo su supervisión hace diez años.
Fue una condición previa clave para su ayuda y para establecer vínculos más fuertes cuando Ucrania declaró un rumbo prodemocrático en medio de la invasión inicial de Rusia en 2014.
"La Unión Europea está preocupada por las recientes acciones de Ucrania con respecto a sus instituciones anticorrupción", afirmó el portavoz de la Comisión Europea, Guillaume Mercier.
La UE proporciona una importante asistencia financiera a Ucrania, condicionada a avances en materia de transparencia, reforma judicial y gobernanza democrática.
La erradicación de la corrupción también es un requisito fundamental para la solicitud de Ucrania de unirse a la UE.
La comisaria europea de Ampliación, Marta Kos, criticó la adopción del proyecto de ley.
"El desmantelamiento de las salvaguardas clave que protegen la independencia de Nabu es un serio paso atrás", escribió Kos en las redes sociales, afirmando que ambos organismos eran "esenciales" para el camino de Ucrania hacia la UE.
Los embajadores del grupo de naciones G7 también han dicho que les gustaría discutir la presión sobre Nabu y Sapo con los líderes ucranianos.
Sin embargo, los aliados de Ucrania se mostrarían extremadamente reacios a retirar la ayuda y la cooperación en un momento en que sus tropas están luchando en la línea del frente.
BBC