La sanidad está en colapso, la UIL FPL y la Enfermería proclaman estado de agitación

UIL FPL y NURSIND FVG proclaman la agitación del personal de ASUGI ante una situación explosiva que pone en riesgo la estabilidad del sistema de salud pública en la zona de Isonzo , y con ello la salud de los ciudadanos y la dignidad de los trabajadores . Las siglas denuncian la falta de personal en todos los perfiles (enfermeros, auxiliares de enfermería, técnicos, administrativos), que ha superado todos los límites de tolerancia. En numerosos centros, denuncian, el trabajo está al límite o por debajo de los cupos mínimos , con turnos sin cubrir , horas extras forzadas y un clima laboral exasperante. El personal está exhausto, al borde del agotamiento, y aun así continúa garantizando, con gran responsabilidad, la asistencia y la presencia.
La Compañía, según afirman, ha incumplido todas sus promesas : llevan meses esperando la activación de los reemplazos por maternidad y enfermedades de larga duración, pero no se ha hecho nada . La Dirección General no responde , ni siquiera a las reiteradas solicitudes durante casi dos años para la ampliación del transporte interno por la tarde. Un servicio esencial que, de activarse, permitiría a la OSS volver a prestar asistencia real , en lugar de ser empleada como camilleros o transportistas, alejándolos de las salas donde son indispensables.
Pero hoy, reiteran, ya basta. Las Unidades Operativas de Medicina y Cirugía de los hospitales de Gorizia y Monfalcone corren un riesgo real de cierre. «No por falta de pacientes ni de tecnología, sino por decisiones corporativas irresponsables , que ya ni siquiera garantizan el personal mínimo para su funcionamiento». A todo esto, recuerdan, «se suma una de las páginas más oscuras de la sanidad regional:
el vergonzoso acuerdo sobre la unificación de los fondos empresariales , firmado por la CGIL, la CISL y la FIALS , que ha robado a cada trabajador de la zona del Isonzo más de 800 euros cada uno , sancionando una vergonzosa división entre los que tienen derecho al salario completo y los que son sacrificados en nombre del equilibrio político.
¿Acaso hay ciudadanos de la Serie A y ciudadanos de la Serie B? ¿Valen menos la vida y el trabajo si vives o trabajas en la zona del Isonzo? La sensación es la de una silenciosa cancelación de la sanidad pública en Gorizia y Monfalcone. Pero el silencio no es solo corporativo. ¿Y los alcaldes? ¿Acaso los alcaldes de Gorizia, Monfalcone y los demás municipios de la provincia aceptan sin reaccionar que sus conciudadanos se vean privados de atención, servicios y dignidad? ¿Dónde están sus voces? ¿Dónde está su oposición? Guardar silencio hoy significa ser cómplice de este desastre.İl Friuli