Exministros de Medio Ambiente critican el polémico proyecto de ley de flexibilidad ambiental

Siete ex ministros de Medio Ambiente criticaron, este jueves (5), el proyecto de ley (PL) que pretende flexibilizar la concesión de licencias ambientales, iniciativa que generó polémica en Brasil.

Tras ser aprobado en el Senado en mayo, el proyecto deberá ser discutido próximamente en la Cámara de Diputados, mientras el país se prepara para albergar la conferencia COP30 de la ONU en Belém en noviembre.

El debate también ocurre mientras el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva espera una licencia para un megaproyecto de exploración petrolera que ha sido criticado por ambientalistas en el Margen Ecuatorial, una zona marítima cerca del Amazonas.

“Lo que propone este proyecto de ley es muy grave, porque incluye no solo proyectos de pequeña escala, sino también los de mediana escala, que tienen un impacto mucho mayor y requerirán muchos menos estudios y mecanismos para reducir sus impactos”, advirtieron los exministros en una carta difundida con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra el 5 de junio.

También cuestionaron la creación de reglas excepcionales para obras consideradas estratégicas por los gobiernos, “cuyo licenciamiento será más político que técnico, lo que es un gran riesgo”, destaca la carta, firmada, entre otros, por Carlos Minc, Edson Duarte, Gustavo Krause e Izabella Teixeira.

Al ser consultado esta semana sobre su opinión, el presidente Lula afirmó desconocer el contenido del proyecto de ley. Él tendrá la última palabra sobre su aprobación o veto.

La iniciativa no solo crea excepciones para obras estratégicas, sino que también facilita la concesión de licencias para ciertas iniciativas económicas con una simple declaración de compromiso. Según sus defensores, el nuevo marco actualizaría y simplificaría las normas burocráticas que consideran obsoletas.

Cientos de activistas marcharon hoy al Congreso Nacional en Brasilia para protestar contra el proyecto de ley. "Aprobar una ley como esta es un delito. Liberará las licencias ambientales a favor de la agroindustria, las constructoras hidroeléctricas y las mineras, y esto perjudicará aún más a la población", declaró la manifestante Farina Dalla.

Organizaciones ambientalistas también advirtieron del impacto negativo directo, “al someter el sistema de análisis a presiones e intereses puramente políticos”, según la red Observatorio del Clima.

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